Hoy hablé con Dios. Y le pregunté lo que me he venido preguntando desde que tengo como 13 años pero que no me atrevía a decir en voz alta ni a mi misma, y no lo había hecho porque me daba verguenza. Dios me ha dado tantas cosas por las cuales estar agradecida, entonces para mí, era una verguenza el pensar en esas cosas porqué yo me decía a mi misma: ¿Tienes idea de lo superficial que te escuchas al pensar eso? Y una parte de mi resentía a Dios, y cuando menos lo pensaba, me daba cuenta de lo que estaba haciendo y lloraba porque me sentía culpable al pensar eso de Dios. Pero hoy por primera vez pude preguntarle a Dios sin sentir ningún resentimiento, tan solo... preguntarle teniendo una conversación, y esto es lo que le pregunté:
¿Porqué no soy femenina como ella?
¿Porqué ella es delgada y yo no?
Mira el cabello de aquella de allá, ¿porqué el mío no es así de hermoso?
¿Cómo es que ella luce todo lo que se pone y yo no?
¿Porqué ella si puede y yo no?
¿Porqué yo no soy hermosa?
¿Porqué yo no brillo?
¿Porqué yo no?
Y Dios me dio una respuesta corta y sencilla:
Tú no brillas porque tú no te lo permites.
Y yo me miré al espejo y en ese momento lo supe. Yo soy todas esas cosas, pero yo no me permito serlas, porque siento que no merezco serlas, que no soy lo suficientemente buena.
- No uso ropa girly porque siento que a mí no se me ve bien.
- No arreglo mi cabello de mil maneras hermosas porque pienso que a mí no se me verá bien, que parecerá algo tonto entonces pienso "Mejor me ahorro el oso".
- No escribo porque siento que nada de lo que escribo tiene sentido y que son solo cosas absurdas.
- Tengo tantas ideas y proyectos que he visto en mi mente un millón de veces pero nunca dejan de ser solo eso, ideas, porqué siempre pienso que son tonterías y que no tiene caso llevarlas a cabo o siquiera mencionarlas.
He llegado incluso a despreciar a la parte amorosa que hay dentro de mí. ¿Porqué? Porque una vez alguien que yo quería mucho me dijo que esa parte de mí era insoportable. La parte de mí que le gusta dar abrazos y decir lo mucho que quiero a alguien. La parte de mí que tantas veces ha empezado a escribir un e-mail o una carta para alguien que quiero y que al final termino borrando o tirando a la basura o a veces ni siquiera llego a empezarla porque en mi mente el pensamiento que predomina es: Que cosa tan absurda, vas a fastidiarlos y se van a ir si se dan cuenta de lo melosa e insoportable que en verdad eres.
Creo que no he sido yo misma por tanto tiempo, que he llegado a olvidarme de quien soy. No soy yo con nadie. Quizás solo con mi mamá. Ni si quiera con Bertha que viene siendo mi otra mamá, a decir verdad, creo que como ella es de las personas que mas amo es de las personas con las que mas me contengo. Entre mas amo a una persona, mas ganas me dan de demostrarlo. Sin embargo no lo hago. Las personas que me conocen me dirían que estoy loca que claro que lo demuestro pero esta es la cosa: a ninguno de ellos se los he demostrado en verdad, no en su magnitud completa, porque la última vez que hice eso con una amiga, esa amiga me golpeó y no hablo solo emocionalmente, hablo también físicamente. Recibí un puñetazo que lastimó mas que cuerpo, lastimó mi orgullo y mi corazón. Desde entonces encapsulo mi amor y de vez en cuando las personas a mi alrededor ven los destellos de ese amor que les tengo cuando me lleno demasiado y momentáneamente 'exploto'.
Esto me lleva a la conversación que tuve con Dios hace dos días. Estaba charlando con Él acerca de mis miedos y le pregunté que si Él sabía cual era mi mayor miedo porque yo no estaba segura de cual era y me dijo que sí. Entonces yo le pregunté que porqué no me lo había dicho antes si yo ya le había preguntado en muchas ocasiones, y Él me dijo que antes no estaba lista y que ahora lo estaba. Mi mayor miedo es el miedo al rechazo. Y ahora las cosas tienen sentido, no todas obviamente, pero muchas de ellas. Encapsulo mi amor porque no quiero que rechacen mi amor, no quiero que me rechacen. Esa amiga no fue la primera ni la última en rechazar mi amor pero ella fue la que mas daño hizo, y mis malas experiencias me hicieron cerrarme, aún en la congregación. Creo que con mis amigos de la congre es con los que mas me permito tener esos 'destellos' de amor, y con las que mas es con Bertha e Ivone, pero aun con ellas me quedo corta. Tengo tanto miedo a perder, perderlas a ellas y a mis amigos si dejo que mi verdadera yo salga. No estoy diciendo que sea una persona falsa con todos, no es eso, sino que soy yo en un porcentaje menor, como si los probara para ver si me toleran.
Ejemplo práctico:
- Si al día le doy, por decir, a Ivone 3 abrazos, realmente quiero darle 5 o 6 pero no lo hago porque en mi mento pienso: Vas a ahuyentarla, no lo hagas, no seas tonta, eso de los abrazos es absurdo, ya es suficiente.
Y un ejemplo reciente es que les envié flores a Bertha e Ivone y una parte de mí no dejaba de considerar la posibilidad de que hubiera sido algo absurdo.
Y para mi tener ese tipo de pensamientos era algo tan... natural, que ya ni si quiera los veía como algo extraño, ya no me daba cuenta, hasta hoy. Es como si hubiera estado ciega todos estos años, porque me acostumbré a no dejar que mi amor saliera, pero creo que sin mi amor, dejo de ser yo y por eso me he olvidado de quien soy, porque empecé a encapsular todo el amor, no solo el que tenía por las demás personas, sino también el que me tengo a mi misma.
Pero hoy empiezo el proceso de recuperarme a mí misma, porque Dios ha estado tratando conmigo para que yo pueda entender ciertas cosas muy importantes.
1. Él me dio el amor que yo tengo por las personas por una razón y definitivamente no es para que lo encapsule y lo esconda, ese amor tiene un propósito y ese amor es hermoso.
2. Las personas que me rechacen debido a ese amor, no me rechazan a mi, rechazan el amor en general, personas que lo necesitan pero que no lo saben.
3. Necesito mi amor porque ese amor es una parte esencial de mi, es una de las cosas que me hacen ser quien soy y si lo escondo, lo sofoco y lo mato y en el proceso me pierdo a mi misma.
4. Cuando escondo ese amor tan grande que hay dentro de mí, yo también lo rechazo y al rechazarlo, rechazo el diseño de Dios para mí.
Y todo esto es algo que Dios ha venido preparando pero esa conversación que me llevó a darme cuenta de todo esto surgió porque ví la película 'Letters to God' y me ahí capté un destello de quien solía ser y de todo el bien que Dios quiere hacer a través de mi y que ha querido hacer desde hace tiempo pero que no lo he dejado porque Él quiere obrar a través de ese amor tan grande que yo escondo.
Así que a partir de hoy me dejo de esconder. Ya no voy a sofocar mas ese amor, no voy a sofocarme mas a mi misma y voy a encontrarme de nuevo, y lo primero es perdonar. Tanto a las personas que me lastimaron como a mí misma por hacerme tanto daño los últimos 6 años.
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