Charlie

Me puse a pensar en porqué me llega tanto tanto el libro como la película de "The Perks of Being a Wallflower" y me dolió darme cuenta que es porque me identifico con Charlie. Demasiado. Y... y se me hizo triste.

Fragmento

Abro los ojos y miro el reloj, 4:36 am. Bueno, al menos pude descansar unas horas. No tiene caso intentar dormir, sé que no lograré conciliar el sueño. Mi mente es como un disco rayado, repitiendo una y otra vez el mismo verso de la misma canción. Sé que una vez que empieza, no hay manera de hacer que se detenga, en cuanto cierre los ojos, la pesadilla regresará. La misma pesadilla de siempre. Puedo verla mirándome, una expresión de dolor plasmada en su rostro, y yo puedo sentir como se encoge mi corazón. Mi mente entra en estado de alerta, sé que debo arreglarlo, disculparme, decirle que nada de lo que dije era verdad, pero no hay tiempo, antes de que pueda articular una sola palabra escucho el claxón del trailer justo antes de impactarse contra nosotros.

Los primeros siete meses luego del accidente me despertaba gritando y llamándola. Ahora solo me despierto empapado en sudor, sintiendo un escalofrío recorrerme el cuerpo. La pesadilla no es el sueño en sí, es el despertar sabiendo que es verdad. Probablemente suene tonto pero una parte de mi piensa que quizás si un día lograra decir algo en el sueño antes del impacto, si al menos pudiera tomar su mano para que ella supiera que nada era verdad, entonces tal vez ella despertaría.

Historias

Suceden historias hermosas todo el tiempo, si sales a la calle estoy segura que cada persona con que te topes tendrá una historia que contarte, pero por desgracia la mayoría de estas historias se quedan sin ser contadas. La variedad es infinita, hay unas largas, que vienen desde años atrás, hay otras que pudieran llegar a parecer sin importancia debido a su corta duración, y también las hay las que van comenzando, y muchas veces, son éstas las mas importantes, porque son las que se están llevando a cabo en el aquí y ahora. En mi opinión, las historias mas hermosas son las que entrelazan la vida de las personas de manera casi mágica, cuando no cabe duda que es Dios el que mueve las piezas del rompecabezas para asegurarse de que ciertos encuentros sucedan. Me gusta imaginarme que así como cuando nosotros leemos un libro y sabemos que se acerca algo emocionante, quizás así Dios cuando por fin sucederá ese encuentro que Él ha estado planeando, debe de ser algo muy especial para Él también. Dios me regaló una de esas historias, empezó hace poco mas de un mes, así que en realidad por ahora aún es una historia muy corta, pero eso no tiene nada que ver en absoluto, porque es la historia en la que Dios me dio a la hermana mayor que siempre añoré. No sucedió por partes como suele pasar, fue de golpe, fue inesperado y fue un hermoso regalo. De esos regalos que son tan increíblemente bellos que no puedes evitar preguntarte si en verdad te lo mereces, pero de igual forma, todos los días desde que esta historia tuvo su comienzo, le doy gracias a Dios por haberla escrito y por haberme dado a Alex.

Dream?

Sometimes it feels like it's all a dream, like I never came back and I'm just imagining it all, but then I wake up and I realize I'm here and that it's not a dream, just reality.

Recuerdos, canciones y malas decisiones

Hoy me pasó eso que a veces sucede cuando uno escucha una canción que hace mucho tiempo no escuchaba. Al empezar la tan conocida melodía, me transportó a un tiempo ya pasado. Primero sentí ese calorcito en el corazón y pensé: "Esta canción me gustaba tanto, ¿porqué la dejé de escuchar?" Y luego se me paralizó la sonrisa que se asomaba por mis labios cuando logré recordar el porqué había interrumpido mi relación con dicha canción. Que triste es que un mal recuerdo arruine una buena canción, traté de ignorar ese pensamiento y esa imagen mental que se formaban dentro de mí para poder disfrutar la canción pero al final no pude y opté por cambiarla. A veces pienso que sería muy útil tener una máquina del tiempo para poder volver atrás y cambiar cosas que pasaron, corregir decisiones erróneas o para al menos advertirme a mí misma de ciertas cosas. Si tan solo yo pudiera volver al día en que se grabó ese recuerdo que me aprieta el corazón cada que esa canción aparece, me daría un solo consejo: Huye.
No puedo imaginarme el dolor que le debe haber causado a Dios verme pasar por eso, porque yo lo viví, pero Él tuvo que quedarse de espectador, sin poder hacer nada porque fui víctima de una mala decisión y yo tenía que vivir mis consecuencias. Yo ya pedí perdón a Dios y perdoné a quien debía perdonar pero supongo que la herida aún no cierra del todo. Añoro el día en que pueda decir que ya no me duele recordar y que por fin pueda escuchar mi canción sin que me cause un conflicto interno. Sé que Dios sigue trabajando en eso, y que pronto estaré sana del todo.

Nunca

Hoy los pensamientos volvieron. Comenzaron a atacarme a cada paso que daba, me lanzaban dardo tras dardo con la esperanza de hacerme tropezar pero me rehuso a caer de nuevo en eso, he recaído vez tras vez pero se acabó, no más. Tengo a Dios en mi vida, y yo decido creerle a Él antes que a cualquier mentira que el diablo quiera implantar dentro de mí, durante años me tragué cada mentira que me dijo y soporté cada uno de sus azotes pero esto ya se terminó. No tengo porqué volver al agujero, eso ha quedado atrás y no pienso regresar nunca jamás.

Regalos

Los regalos que Dios da son los mejores regalos que uno puede llegar a recibir, son el tipo de regalos que uno va a agradecer el resto de su vida y que cada vez que mire para atrás con lágrimas nostálgicas va a decir: "Qué bárbaro, que regalo tan hermoso." Este fin de semana Dios me dio mas de un regalo, pero entre ellos brilla como estrellita mi amiga Alex. Es increíble como Dios suple necesidades sin que uno se dé cuenta. Aquí me tienen, de vuelta en Tampico teniendo tan solo una firme convicción de que Dios me quiere aquí para algo, penando las amistades que dejé atrás cuando Dios me da un regalo pelirrojo envuelto en amor, risas y acentos argentinos. No sé como explicarlo, pero es de esas veces que conoces a alguien e instantáneamente sabes que van a ser grandes amigas, como si fuera cuestión de fuerzas magnéticas, o de algo predestinado. En fin, mas bien yo sé que Dios lo tenía planeado desde mucho antes, y es por eso que me maravilla lo hermoso que es Él. Yo sé que mi amiga Alex es de esos regalos de los cuales le voy a agradecer a Dios por el resto de mi vida, y lo sé porque tengo menos de una semana de conocerla y ya le doy infinitas gracias a Dios por su vida y por haberla puesto en mi camino.

Casi adiós

Dios ha trabajado en mi durante este año, a veces sin que yo misma me percatara de lo que estaba sucediendo dentro mío. Me siento mas fuerte, mas segura. Los demonios siguen lanzando flechas, con la esperanza de lograr hacerme caer, y aunque un par de veces han pasado silbando muy cerca mío, Dios me ha ido guiando para tomar los caminos correctos para evadirlas. Ha puesto a las personas correctas en el momento correcto para que me dieran un tironcito justo antes de que las flechas me dieran. Estoy muy agradecida con Él, este año ha sido una travesía, he aprendido tanto y he entendido muchas cosas, además he vivido experiencias grandiosas y he conocido a personas inolvidables. Voy recogiendo memorias, momentos que guardo en mi corazón para mirar atrás y sonreír al recordarlas una vez que me vaya. El tiempo se me acaba, y es un trago medio dulce y medio amargo. He conocido otra vida, otros amigos que han dejado su huella en mi corazón, va a ser difícil decirle adiós a todo lo que ha sido mi hogar el último año, sin embargo, al mismo tiempo es refrescante el pensar en volver a lo que era mi vida antes. Son sentimientos encontrados, pero yo sé que Dios tiene un plan, Él siempre tiene un plan.

Hoy me duele el tiempo

Hoy me duele el tiempo, me duele el pensar que se me escapa entre los dedos por mas que intento aferrarme a él. Hoy me duele el pensar que se me acaban los almuerzos y las películas, las pláticas y las risas. Me duele que me voy. Me emociona, pero me duele. Me pone ansiosa pensar que todo esto va a terminar, y nunca lo volveremos a tener tal y como es ahora, no se va a repetir. Tendremos nuevas cosas mas adelante, nuevas aventuras y nuevas historias que contar, pero a veces es difícil dejar ir a lo que hoy es el presente y que pronto se convertirá en pasado.
Hoy me duele el tiempo escurridizo que por mas que le pido que se quede, él se sigue alejando. Hoy me duele que a pesar de que estoy segura de que nos volveremos a ver, no sé cuando, no tengo un día exacto al cual añorar. Me duele que van a arrancar de mi rutina a mi amiga.
Hoy me duele el tiempo porque me impide conciliar el sueño y me hace sentarme a llorar a la orilla de mi cama. Hoy me duele el tiempo porque implica cambio, un cambio para el cual no sé si estoy lista. Me duele porque me asusta.
Hoy, hoy me duele el tiempo y me siento tonta por sacarlo aquí, porque soy cobarde y no me atrevo a decírtelo de frente por miedo a llorar frente a ti. Hoy me duele el tiempo porque se desvanece, y tan solo voy a tener estas memorias que he venido guardando en el álbum de mi corazón, son bellas, hermosas, no lo voy a negar, pero preferiría seguir viviéndolas a tener que mirar hacia atrás para recordarlas. Hoy me duele que te voy a extrañar una infinidad y por mas que quiero no pensar en eso, no puedo, porque el reloj sigue caminando y haciendo que me duela el tiempo.

Botellas, por favor

Hay memorias que me gustaría poder embotellar y llevarlas conmigo siempre.

¿Miedo? Parte I

Esto lo escribí estando en Italia pero mucho me temo que la parte II no la voy a publicar, esa es tan solo para conocimiento de unos pocos privilegiados a conocer los rincones de mi ser pero cumplí mi promesa y escribí la parte II.

Tengo una página en blanco que me mira cada vez que entro a mi habitación, me reta a que me atreva a tomar la pluma que se encuentra a su lado, pero en estos cuatro días simplemente la he contemplado sin atreverme a dejar fluir mis ideas. No es que no quiera, porque si quiero, es mas, lo anhelo pero siempre hay algo dentro mío que me refrena pero creo que todo viene a ser parte de lo mismo, ese miedo tan grande del que tanto hablo y que ni yo misma termino de entender. Creo que ese sería un buen tema del que hablar, ese dichoso miedo que a veces me amarra y me atormenta porque lejos de ser una exageración, en verdad ni yo termino de entenderlo. Quizás me ayudaría un poco el tratar de escribir sobre él, tal vez me ayude a entender, a ponerle nombre siquiera, a saber como pedirle a Dios que se lo lleve. Creo que Dios quiere que lo descubra, al miedo, quizás es necesario llegar al fondo de todo esto porque el no poder escribir, es tan solo una de las muchas maneras en que me hace sufrir. Sí, mañana trataré de describirlo, y de plasmar las situaciones específicas en que me aqueja, tal vez así sepa como librarme de él.

Me da igual

Hoy me derritieron con tres palabras, tres simples y sencillas palabras: 'Me da igual.' Yo sé que parecen tres palabras cualquiera, pero para mí significaron el mundo entero el día de hoy. Gracias, Nani.

Relaciones

Es curioso como hay personas que llegan a tu vida, se quedan un tiempo, y luego, como si nunca hubieran formado parte de ti, se van. En cambio hay otras que, sin darte cuenta, echan raíces en tu vida y tu corazón y llegas a tener la extraña sensación de que siempre las necesitaste en tu vida, sólo que no lo supiste hasta que aparecieron.

Writer y retos

Entro a mi aplicación 'Writer' la cual ya tenía un tiempo ignorando, sin atreverme a borrarla. Es el recuerdo constante de una promesa sin cumplir pero cada vez que intento borrarla, me golpea la sensación de que si lo hago, me estoy rindiendo, así que simplemente la dejo ahí, segura en medio del resto de las aplicaciones del menú de mi teléfono. Ahora que he vuelto a entrar, me provoca reírme en voz alta que al abrir una nota nueva dice: 'Have something to say?' Y no puedo evitar responderle en mi mente: 'Sí, tengo un millón de cosas que decir pero que no me atrevo a expresar.' Curioso, ¿no? Como una simple pregunta puede ponerte de cabeza y hacer que te retraigas y te pongas a la defensiva por instinto.

Hoy me impusieron un reto, mi amiga Nani me dijo: "Te doy una semana para que escribas algo y me lo muestres." Ivone me había dicho algo parecido y de ahí nació el reto de Nani pero la diferencia es que a Nani la tengo acá, y no podría esconderme de ella aunque quisiera. Podría inventarme mil excusas pero yo sé que serían solo eso, excusas, mentiras aún, y odio las mentiras. Me gusta el reto a decir verdad, me da miedo pero al mismo tiempo me provoca esta emoción tan grande, como si algo comenzara a inflarse dentro de mí como globo. Eso sí, me da miedo que el globo me explote en la cara, ¿cómo? Escribiendo algo que no le guste a Nani, o peor aún, que no me guste a mi. Ugh, y ya volví al tan conocido terreno del perfeccionismo. Realmente necesito ponerle una muralla alrededor a esa zona para que no pueda volver a entrar ahí nunca mas. Para ser honesta, dudo escribir algo que no le guste a Nani, pero escribir algo que no me guste a mi es, tristemente, bastante sencillo. Bueno, de todos modos voy a intentarlo, no, voy a lograrlo. Sí, voy a escribir algo, no sé que, un cuento, un ensayo, una reflección o algo. Ahora que lo pienso, esto bien podría contar como ese algo... No. Eso sería como trampa.

Mañana empiezo a buscar mi tema, aunque bueno, no necesito buscar mucho, tengo mil temas dentro mío, ese no es el problema. Lo que necesito es encontrar mi voz y olvidarme del miedo. Es como si yo fuera un archivero gigante, tengo cientos de archivos, temas, cosas de que hablar,que compartir, y tengo la llave para entrar, pero no me atrevo a entrar. Que raro, ¿no? Que no me atreva a mirar dentro de mí misma, no por miedo a lo que encuentre, sino porque sé que al encontrar lo que sea que busco, no voy a poder refrenar las ganas de compartirlo, de plasmarlo y querer mostrarlo. Lo que yo necesito es perder el miedo y quitarme ese peso de los hombros del perfeccionismo, y eso es lo que voy a hacer.

Escribe, escribe

De esos días en los que me da una comezón gigante por escribir, pero como siempre, no me atrevo; por miedo a que lo que sea que escriba no sea lo suficientemente bueno, a que no me guste, a que esto y a que lo otro. Entonces, me olvido de esa idea de escribir y me refugio haciendo otra cosa, leyendo, escuchando música o charlando con alguien, pero hoy fue diferente, hoy ese deseo tan grande me persiguió todo el día y no me dejó tranquila. Sentí ese tan conocido hormigueo alrededor de mis dedos, esas ganas de tomar lo que sea, la computadora, una pluma, una crayola aunque sea y empezar a escribir, y hoy por mas que lo intenté, por mas que traté de huir, no pude, por mas que corría, me encontraba de nuevo. Así que aquí estoy, y como siempre que me decido a someterme a este deseo que me carcome, tengo las ganas y la pasión por escribir, pero nada sobre que escribir, o bueno no, eso es mentira, tengo demasiadas cosas sobre las cuales escribir, pero las ideas me dan vueltas en la cabeza y por mas que intento acomodarlas, no puedo. Siempre es lo mismo, termino  mirando fijamente la página del cuaderno, o el bloc de notas del computador sin saber que plasmar en ese blanco que me quema, que me mira como retándome a que me atreva a hacerlo, a crear algo, lo que sea. Son casi las 2 de la mañana y no puedo dormir porque me corroe ese deseo de escribir.
Ahora que lo pienso, últimamente me ha pasado esto muy seguido, he tenido varios días en que siento como que me dan un codazo en las costillas, o mas bien en los dedos. Es gracioso como sucede, porque empieza en mi estómago, como si fueran mariposas muy pequeñas que revolotean dentro de mí, buscando la salida sin poder encontrarla, entonces van subiendo y se separan al llegar a mis hombros, un grupo toma el camino hacia mi brazo derecho y otro grupo toma el camino hacia el brazo izquierdo, y siguen hasta llegar a mis manos, donde se apretujan hasta sentir como si intentaran salir por los poros de mis dedos. Es entonces cuando no puedo evitar mirar mis manos al sentir ese hormigueo, y no sé, es curioso, porque cuando miro mis manos siento que están incompletas, que me falta una pluma o un lápiz, algo. Hay días en que es diferente, en que no tengo el hormigueo, pero que me palpitan los dedos, como si mi corazón me instara a escribir, como si pensara que al bombear sangre extra a mis manos fuera a hacerme ver que estoy olvidándome de algo, que aún hay algo por hacer.
Quizás es Dios, quizás es Él quien intenta decirme que escriba, nunca lo había visto así pero esa idea acaba de entrar a mí y bien podría ser verdad, ¿porqué no? Sí es que tengo el don de escribir, fue Él quien me lo dio, ¿cierto? Entonces sería natural que me exhortara a ponerlo en práctica.
La cosa es esta, siempre soy demasiado dura. No me perdono un error, si escribo algo y al releerlo suena ligeramente raro o mas bien si no suena absolutamente perfecto, me frustro, lo borro y boto la idea de escribir, sintiéndome como un fracaso. Odio ese sentimiento, me envuelve como sábana, es horrible y hago lo posible por evitarlo, así que por eso no escribo, me evito esa sensación de fracaso y de sentirme que fallé, ¿a quién? No sé, a mí supongo, ya que obviamente nadie mas llega a leer lo que borré. Creo que tengo miedo a que me juzguen, que juzguen lo que escribo, lo que tengo para decir y para compartir. Sí, creo que sí. Me he dado cuenta que muchas veces me escondo de mí misma, no sabría explicar en que consiste o como es que lo hago, pero sé que lo hago. Me alejo de mis pensamientos y mis emociones, los guardo en la botellita de cosas que tiro al mar del olvido que hay dentro de mi, el problema es que la marea de ese mar es traicionera, no se lleva las cosas que le tiro, sino que las arroja de nuevo, vez tras vez, pero yo sigo intentando tirarlas de todos modos. Qué tontería, ¿no? Necesito dejar de esconderme, eso lo sé, pero es mas fácil decir que hacer. Al menos hoy me dejé llevar y aunque el hormigueo todavía no se va, sí disminuyó  un poco, como si me dijera: 'Bueno, te doy chance, pero no creas que se me ha olvidado.'
Debería preguntarle a Dios acerca de esto, eso también ya lo había pensado, pero soy cobarde, le temo a la respuesta, así que evito la pregunta. ¿Qué tal si me dice que sí? Que sí es Él y que deje de esconderme y que empiece a escribir. Yo sé que no suena tan grave pero para mi significaría salir de mi cueva, de mi zona de protección, de comodidad. Me da miedo, a decir verdad, me da pánico.

Nocte Caelum

"When I open that door, you'll run as fast as you can and you'll never look back, you hear me?"

"But what about you? Arent' you coming?" I asked with tears in my eyes, I already knew the answer, but I had to ask, just in case.

"No, this is my destiny, to set you free and help you find your way."

"But-"

"No buts," He lowered himself so we were the same height. "We were all born with a purpose, we were all created to do something. Your purpose is not here, it never was. You must promise me that you'll never look back, you'll just keep going forward from here on, are we clear? You're going to run as fast as those skinny legs of yours can take you and you will not stop until you can't stand anymore. They'll look for you, day and night, and they won't give up easily. Your life will be in danger the second you step outside, for they will know and they will do everything in their power to either bring you back, or take you down, you hear me? You'll stop only to sleep and eat and maybe rest but never more than 10 minutes, that's it."

"When will I be able to stop running?"

"When you reach Nocte Caelum."

"But how will I know I'm there?" I'm shaking now, but it's not the cold outside, it's the one inside, the fear.

"You'll see the warriors that shine like stars, and the plants will faintly glow all around you.

"Warriors? You never said anything about any warriors, what if they attack me?"

"They won't."

"How do you know?"

"Because they've been waiting for you, they've been waiting for you for as long as they've existed." I just stare at him, none of this makes sense. He must've noticed, because he sighs loudly before continuing. "I know you're scared and that you don't understand but you have to trust me. Verloren was never meant to be your home."

"Then why was I here?" I see him look down for a second and bite his lip like when he's struggling with something inside.

"It was a mistake that was never meant to happen."

"What do you mean?" He looks me in the eye with a very serious look, it frightens me a little.

"I knew I'd have to tell you someday," his right hand flies to the inside pocket of his worn vest and comes back out with an old envelope, "everything you need or want to know is here, but don't open it yet, we don't have much time left." He hands me the envelope and I look at it a couple seconds before putting it away in my satchel.

"What's in it?"

"A couple of letters."

"From who?" I watch him hesitate before answering.

"From your parents." My jaw drops and my hands turn to fists at my sides. Don't have a panic attack, don't have a panic attack.

"But you said-"

"I never said anything, everybody else did."

"But you never contradicted them!" I'm shouting now, I can't take the pain that I'm feeling inside, it's like my heart twisted inside of me.

"Shh, shh, calm down Láska. I did what I did for a reason, I had to, it was all so you'd come to this point in your life when you'd finally be free, it all had a purpose."

"You keep talking about this damn purposes, I don't get it." I say in a tiny voice.

"I know you don't, not right now, but you will, oh you will my dear boy." He strokes my hair and then the first sign comes, there's the blue flare, making it's way through the sky and I feel a shiver go down my spine. He notices and pulls me close to give me a hug. "Be brave, Láska and run towards your future and forget all this, forget this forsaken place but don't forget me, for I will never forget you." I feel my eyes welling up and I hug him tight and take a breath so I can take his scent with me as a memory.

"I will never forget you, Gabayan. Never." The tears are now running freely across my cheeks. "I will forever remember everything you gave me and all you did for me. I'll miss you, Gabayan, I'll miss you more than anything in the world."

I can hear the humming of the fireflies that are awakening, that's the second sign, I'll have to leave soon. Gabayan pulls away and looks at me.

"What?"

"Nothing, we must hurry, we don't have much time left." He stands up and pulls the twisted key out of his pocket and inserts it in the keyhole, makes it turn and the door clicks. He yanks it open just as we hear the siren, that's the third sign. He gives me an encouraging nod and a half smile. My stomach burns as I turn around, take a breath, and start running. Six seconds. I run for six seconds when I hear a pained grunt behind me, and that's how I know they're already after me, because they've already killed Gabayan.

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Up with your turret,

Aren't we just terrified?

Love Poem

This is one of my favorite love poems ever, it was recited by an anonymous Kwakuitl Indian of Southern Alaska to a missionary in 1896. I came across it through one of Helen Fisher's talks, so here it is:

Fire runs through my body with the pain of loving you

Pain runs through my body with the fires of my love for you

Sickness wanders my body with my love for you

Pain like a boil about to burst with my love for you

Consumed by the fire with my love for you

I remember what you said to me

I am thinking of your love for me

I am torn by your love for me

Pain and more pain

Where are you going with my love?

I am told you will go from here

I am told you will leave me here

My body is numb with grief
Remember what i have said, my love

Good bye, my love, good bye.